EDITORIAL

Este poema nació condenado
Las letras arrojan melancolía
El texto se viste de rojo
El escritor no ve más allá de su nariz
Ego
Ególatra
Voy en busca de las letras sobre mi vida
Ego
Furia del ególatra
Las palabras van demasiado lentas
Me dejo hechizar por el abismo de cualquier humedad
El alma curiosa puede más que el pensamiento vulgar
Arrojo la histeria por el camino del surrealismo
Cubro de bazofia la arquitectura de mi vida

Voy despierto
Estudio la retórica de mi holgazanería
Sigo sintiendo que soy el mejor escritor
La vanguardia de tu amor me trata con desprecio
Pero de vez en cuando
Descubro que me miras
Es ahí donde me detengo
Escribo frases convincentes
Pero son solo momentos
Nada es para siempre

A solas con las palabras
Identifico algunas luces
Empiezo a identificar donde esta la pared
Comienzo a describir con adjetivos el lugar
Miro tres veces la misma foto
Es ella con su figura convincente
Me arranco y me alcanza
Llamo al ego
Descubro que soy el mejor escritor y poeta
Nuevamente Pienso
La vanguardia de tu amor que me trata con desprecio

El deseo de ser cotidiano me absorbe
Las frases poéticas no me dejan
Voy en busca de la frase trascendental
Esa que necesita ella para convencerse
No basta solo con el ego
Pienso de inmediato
“¡Oh ego!, descubro que vienes conmigo
Sacad todo lo que tienes en el bolsillo
Ella busca ver tus manos
La curva de la vida
¡Ego! Mira con virtud aquellos ojos
Vienen a dejar huella”
Los ojos se detienen con tu belleza
Alimento con palabras tu ausencia
Imagino tu figura desnuda en mis sueños
Aplico la alternativa incorrecta
Despierto y abro la ventana
Descubro que la pared esta llena de frases
Todas me miran
Se mueven y se confunden
Forman mi epitafio
Juegan a la fiesta de fin de año
Miro fijamente
Trato de cerrar los ojos
Las letras me dominan
Ego, no te puedes confundir
Cierro los ojos
Me acuesto sufro una erección
Busco una frase para la palabra sexo
Mis cinco dedos agarran me pene
Mezclo sexo y masturbación
Pienso en ella antes de eyacular
Ego, no me traicionaste
Pero la frase aún no llega

No tengo buena relación con mis oídos
No quiero escuchar
Pienso que debería escribir una poesía de verdad
Saco dos lápices, comienzo

“Estoy en la cima de la decadencia
Figuro en la lista negra de tus cariños
Eres la señorita desprecio, dueña de mi egoísmo”

Esa poesía tiene ritmo, pero carece de contundencia
Vuelvo a pensar

“Las pocas noches a tu lado
Me gustan
Se disfrazan
Convierten los besos en amor
Tu voz
El olor de tu vagina se impregna en mis latidos
Siento tus caricias
Busco el calor de tu lengua
Investigo lo especial de tus pechos
Eres mi reina…
Con tu sonrisa
Tu caminar
Tus frases con signos de pregunta
No paro de mirarte
No puedo dejar de hacerlo
Admiro la belleza de tus ojos
Cuando muerdes tus labios
Después de tus ricos besos
Trato pero no puedo
Eres hermosa y lo sabes…”

Logre encontrar la poesía
Pero ya es tarde para recitarla.